Un modo complejo de aprender: explorar

Ya hemos planteado la importancia de que el niño observe atentamente el mundo que lo rodea, que observe cuidadosamente a los demás seres y a él mismo.

Al observar, el niño busca informarse de la realidad tal como ella se presenta, sigue con atención sus cambios, pero con muy poca o ninguna intervención suya en ellos. Una buena observación permite describir la realidad tal como se muestra.

Al hablar de explorar nos situamos en un nivel distinto. Para explorar es necesario partir de una idea que nos hemos formado con respecto a algo que vimos que sucede reiteradamente, con cierto ritmo o regularidad, o bien exploramos a partir de una pregunta que nos formulamos por algo imprevisto que llama nuestra atención, por ser distinto a lo habitual, a lo esperado.

Ejemplos de preguntas que nos hacemos al reconocer la regularidad con que se cumple un hecho serían:

a) ¿A qué se debe que las cucharas de sopa tengan más o menos esa capacidad?

b) ¿Por qué se ponen cortinas en las ventanas?

c) ¿Para qué se abren ventanas en casi todas las habitaciones?

d) ¿Por qué las pinturas se secan cuando dejamos las latas destapadas?

e) ¿Por qué se plantan árboles en las veredas de las ciudades?

f) ¿Por qué los automóviles miden entre 4 y 5 metros de largo?

g) ¿Por qué los partidos de fútbol se juegan en 2 tiempos de 45 minutos y los de basquetbol duran menos de la mitad?

h) ¿Por qué en algunos deportes se juega un tiempo determinado (fútbol, basquetbol, etc.) y en otros se juega hasta llegar a una cantidad de goles o de puntos sin importar el tiempo de juego (voleybol, tenis, bochas, etc.)?

0 comentarios:

Publicar un comentario